fotos de @CierzoSalvaje
Julio de 2024
La semana pasada me llegó una sorprendente fotografía de @CierzoSalvaje en la que se veía un Lithops sangrando. ¡No bromeo! Sobre las hojas del Lithops había unas gotas rojas de algo que, a simple vista, parecía sangre. ¡Pero los Lithops no tienen sangre!
Tanto a él como a mí nos pareció algo muy extraño. Jamás habíamos visto a un Lithops sangrar y tampoco habíamos leído que algo parecido pudiera suceder. Charlamos un rato sobre el tema y llegamos a tres conclusiones:
Foto nº 1
Gotas rojas sobre los Lithops
En el libro "Lithops, Flowering Stones", de Desmond T. Cole & Naureen A. Cole, se dice lo siguiente (cita literal):
Foto nº 2
Las rubricaciones desaparecen después de limpiar las gotas rojas
Desde el principio @CierzoSalvaje me comentó su opinión: "el pigmento rojo puede salir de los estomas". Esa afirmación tenía sentido, salvo por el color rojo. Los estomas tienen dos funciones principales: (1) permiten el intercambio gaseoso, dando entrada al dióxido de carbono (CO2) y liberando el oxígeno (O2); (2) facilitan la regulación del movimiento del agua a través de la transpiración. En efecto: las plantas también sudan . . . ¡pero su sudor, como el nuestro, no es rojo!
La transpiración vegetal consiste en la pérdida de agua en forma de vapor que se produce en las plantas. A las hojas de estas llega gran cantidad de agua absorbida por las raíces y, en el caso de los Lithops, retenida en su cuerpo como reserva, pero, a veces, solo una pequeña parte es necesaria. La principal función de la transpiración es eliminar el exceso de agua. Además, con la transpiración también se consigue el enfriamiento de la planta, ya que en ese proceso se consumen muchas calorías.
Para transpirar las hojas de las plantas tienen unas glándulas especiales, llamadas estomas, que se encargan de regular el equilibrio hídrico y eliminar el exceso de líquido. La liberación de agua por las hojas protege a la planta del sobrecalentamiento y asegura una temperatura óptima para la fotosíntesis.
Siendo sinceros, yo jamás he visto sudar a mis Lithops, pero, en buena lógica, la transpiración podía ser un buen motivo para justificar las gotas de los Lithops de @CierzoSalvaje. Por estos lares estamos en pleno verano y hace mucho calor, así que sudar es algo razonable. Ahora solo nos quedaba responder a la pregunta más desconcertante: ¿por qué las gotas son de color rojo?
Foto nº 3
¿Son gotas de sudor expulsadas a través de los estomas?
El color de las hojas de los Lithops, como el de todas las plantas, puede ser debido a dos motivos: (1) la existencia de pigmentos (coloración pigmentaria) y (2) la existencia de estructuras microscópicas que interfieren la luz visible (coloración estructural).
Las plantas contienen una gran variedad de pigmentos que dan lugar a los colores que en ellas observamos. Los principales tipos de pigmentos son: la clorofila-a (produce color verde intenso), clorofila-b (producen color verde), los carotenos (producen color naranja), las xantofilas (producen color amarillo), las antocianinas (producen color rojizo, púrpura o azulado) y las ficobilinas (producen color rojo).
La función principal de estos pigmentos es facilitar la fotosíntesis, ya que sirven para captar la mayor cantidad de energía luminosa posible. También, con el paso del tiempo, algunas plantas han utilizado la coloración para mimetizarse con el ambiente y pasar desapercibidas.
En cuanto a la coloración estructural, consiste en la producción de color por superficies con estructuras microscópicas, a veces llamadas esquemocromos, lo suficientemente finas para interferir con la luz visible y, de esta manera, modificar la percepción del color (en realidad los colores que vemos en los objetos que miramos solo son el color de la luz reflejada por dichos objetos).
La coloración pigmentaria siempre es la misma, desde cualquier ángulo de visión, mientras que la coloración estructural es el resultado de la reflexión selectiva de la luz (o iridiscencia), por lo que los colores se pueden apreciar de diferente manera según el ángulo con el que incida la luz.
Cabe destacar que ambos tipos de coloraciones (pigmentaria y estructural) pueden actuar de forma conjunta. ¡Los Lithops son un estupendo ejemplo! Algunas partes de sus cuerpos tienen un color invariable, independiente del punto de vista desde el que los observemos; en cambio, otras partes cambian de color según el tipo de luz que reciben y también según el ángulo desde el que los miramos.
Foto nº 4
Hace falta luz para ver el color rojo de las rubricaciones
Teniendo en cuenta todo esto (lo que podemos leer en los libros a cerca de las rubricaciones rojas de los Lithops; la posibilidad de transpirar que tienen las hojas de las plantas; la influencia de los pigmentos y las capas estructurales en la coloración de las hojas; y lo que @CierzoSalvaje observó en su Lithops) hemos llegado a la siguiente conclusión:
Podría ser que las gotas rojas fueran "sudor" producido por el Lithops, que absorbe los pigmentos rojos de las rubricaciones. Por eso, después de limpiar las gotas, las rubricaciones desaparecen (han pedido los pigmentos que las dan color).
Esta explicación
Así dejamos el tema: ¡abierto! Si has visto algo parecido o se te ocurre alguna otra explicación, . . . ¡no lo dudes, dínoslo!
Foto nº 5
Una explicación posible: gotas de sudor teñidas por el pigmento de las rubricaciones
Dos días después recibí un video de @CierzoSalvaje en el que se veía como los Lithops que "habían sangrado" estaban blanduchos y blanquecinos, con unos síntomas inconfundibles de cocción: simplemente el calor había sido lo suficientemente alto como para que el agua contenida en el cuerpo del Lithops llegara a alcanzar una temperatura tan alta que los tejidos del Lithops se llegaron a licuar.
Reproducimos a continuación tres fotogramas del video:
Después de ver el video llegamos a la siguiente conclusión:
Los Lithops que "sangraron" no estaban transpirando, simplemente se habían cocido. El resto de la explicación que habíamos supuesto era correcta. Es decir, las gotas rojas eran producto del teñido producido por los pigmentos de las rubricaciones.
Aunque algunas plantas, en algunas situaciones, pueden llegar a transpirar, los Lithops no lo suelen hacer. Al revés, los Lithops son "auténticas máquinas" de retener agua.
No era lógico que, en el caso de que los Lithops tuvieran ese comportamiento, nunca lo hubiéramos observado en nuestros ejemplares.
A continuación, se reproduce la conversación final que mantuvimos @CierzoSalvaje y yo.