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Exposición nº 49


Autor: ChatGPT (de OpenAI)


Título: "Charlando sobre Lithops con una máquina (un chatbot de inteligencia artificial)"

Abril de 2023


Últimamente está de moda hablar de ChatGPT, como sistema informático basado en la Inteligencia Artificial, con el que se puede charlar de cualquier tema. Tenía ganas de probarlo y, como uno de los temas en los que estoy más centrado en la actualidad son los Lithops, lo que voy a hacer es hablar de Lithops con ChatGPT.

Me interesan dos cosas: primero, saber si este software puede se catalogado como un sistema experto en el tema y, segundo, comprobar si su forma de responder a mis preguntas es similar a como me respondería un experto humano.

En los siguientes párrafos voy a reproducir las preguntas que yo le hice a ChatGPT (con texto en color azul); las respuestas que me dio ChatGPT (con texto en color verde) y la impresión que me causaron sus respuestas (con texto en color negro).


PRIMERA PREGUNTA:

Buena respuesta. Todo correcto. Emplea un tono muy coloquial y aporta todos los datos esenciales, aunque sin profundizar demasiado. No obstante, en este caso, mi mayor interés no era comprobar que su respuesta era correcta. Se trata de una pregunta muy directa y no hace falta ser inteligente para responder, solo es necesario entender la cuestión y buscar datos. En la siguiente pregunta intentaré confundirle.


SEGUNDA PREGUNTA:

Excelente respuesta. Demuestra que ha entendido el error de concepto que implicaba mi pregunta. Primero me corrige y después, en todo caso, me da una respuesta apropiada a la única interpretación posible que tiene en este caso el término "inventor". Esta pregunta sí necesitaba inteligencia para ser respondida, ya que buscar información no era suficiente. Tenía que responde una pregunta ilógica y lo ha hecho muy bien. Lo ha hecho de una forma "muy humana".


TERCERA PREGUNTA:

Me gusta mucho el resumen que ha hecho para responderme. No se ha extendido demasiado, pero me ha dado la información más relevante. Solamente echo en falta que no haya mencionado que a los Lithops de su propia colección Cole los numeró utilizando un código que, aunque al principio solo era privado, en la actualidad se ha extendido su uso y es muy frecuente verlo como sufijo en cualquier nombre científico de un Lithops: los famosos "números C". Voy a insistir en este tema porque me parece importante y es algo que está estrechamente relacionado con Desmond T. Cole.


CUARTA PREGUNTA:

Al repreguntarle veo que su respuesta no es tan inteligente como yo esperaba. Se ha limitado a darme una redacción alternativa y más amplia, pero continúa sin hablar de los números C. Sin duda un ser inteligente, y experto en el tema, sí me habría entendido. Además, y esto me parece más grave, me ha dado un dado erróneo ya que, es cierto que Cole ha fallecido, pero no murió en el año 1995 (como afirma ChatGPT) sino en el año 2018. ¡Grave error, es un dato elemental y fácil de encontrar!


QUINTA PREGUNTA:

La pregunta era muy sencilla. Y la respuesta ha sido correcta. Me interesaba ver que especie elegía y como justificaba esa decisión. Lo ha hecho de forma satisfactoria.


SEXTA PREGUNTA:

Esta era una pregunta trampa, ya que no se conoce cual es el hábitat natural del que proceden los Lithops steineckeana (aparecieron en un vivero alemán, pero sin ninguna etiqueta, y se desconoce de donde provienen). Es cierto que se sospecha que provienen del Gran Namaqualand, una zona escasamente poblada y situada al sur de Namibia, justo al lado del Rio Orange, que delimita la frontera natural entre Namibia y República de Sudáfrica, pero no es un hecho probado ya que nunca han sido encontrados en África. Hubiera sido preferible que no hubiera dado por seguro ese origen, o por lo menos aclarar el tema.


SEPTIMA PREGUNTA:

A pesar de que no sabe hacer dibujos artísticos, su respuesta no solo no me defraudó, sino que me gustó mucho, porque me demuestra que es capaz de distinguir los aspectos esenciales de los Lithops que serían la base de un buen dibujo artístico. ¡Solo falta materializarlo! Me interesa el tema, así que voy a insistir.


OCTAVA PREGUNTA:

Obviamente, si no sabe dibujar, ¡no sabe dibujar! Noto que cuando se le repite una pregunta el sistema responde lo mismo, pero de una forma diferente. Con esta enumeración de cosas que hay que hacer para dibujar un Lithops, el sistema me demuestra que el concepto lo tiene perfectamente claro. Eso es lo esencial cuando hablamos de inteligencia: ¡manejar conceptos, más que datos!


NOVENA PREGUNTA:

¡Esto sí que me parece inteligente! Un dibujo muy básico, casi infantil, pero claramente inteligente. A veces una cosa tan simple como esta puede ser un detalle tan humano que no esperamos cuando estamos "hablando con una máquina".


DÉCIMA PREGUNTA:

¡Hasta yo, que soy muy malo dibujando, sería capaz de hacerlo mejor! Pero dibujar es expresar conceptos y este sencillo dibujo es una muestra clara de que este sistema de inteligencia artificial es capaz de hacerlo.


DECIMOPRIMERA PREGUNTA:

Creo que este dibujo demuestra que no ha entendido bien qué es un Lithops de dos cabezas. Una de dos, o no se ha enterado de lo que quiero que dibuje o lo ha hecho muy mal. Además, hasta ahora siempre acompañaba sus dibujos con textos que demostraban que la idea la tenía clara, ¡en este caso no es así!


DECIMOSEGUNDA PREGUNTA:

Para terminar esta serie de preguntas relacionadas con los dibujos le pregunto si es él quien ha hecho los dibujos. Más que nada, para intentar ver si es capaz de asimilar el concepto "yo", para saber si tiene conciencia de si mismo. Y, aunque realmente creo que no la tiene, desde luego sí que es capaz de aparentarlo.


DECIMOTERCERA PREGUNTA:

Finalmente, con esta petición, solo esperaba ver si este sistema de inteligencia artificial es capaz de trasmitir emociones. Ya hemos visto que sí puede aportar información (en forma de textos); y también que es capaz de representar conceptos (en forma de dibujos elementales). Pero me faltaba comprobar si puede simular emociones y, al margen de su dudoso estilo poético, está muy claro que ¡"nos está hablando desde el corazón"! (yo también soy capaz de ponerme en plan repipi).


DECIMOCUARTA PREGUNTA:

Un último comentario que me gustaría hacer es que ChatGPT genera adicción. ¡Da gusto hablar con él! Teóricamente ya habíamos terminado la charla, pero se me ocurren nuevas preguntas (como esta). Veo que sabe comparar entre dos cosas parecidas. ¡Lo hace muy bien!


DECIMOQUINTA PREGUNTA:

Otra cosa más. ¡Prometo que esta sí que es la penúltima! ChatGPT tiene una paciencia infinita y es capaz de responder con total seriedad ante preguntas tan raras como esta.


DECIMOSEXTA PREGUNTA:

ChatGPT es sensato. Las respuestas que da a preguntas de tipo práctico, como esta, son muy sensatas.


En resumen, después de esta charla con ChatGPT, creo que estamos en un momento en el que la Inteligencia Artificial está a punto de convertirse en una realidad. Llevo muchos años oyendo hablar de Inteligencia Artificial y, hasta ahora, nunca había notado que ningún software merecía realmente ese calificativo. Pero tengo la impresión de que estamos a punto de conseguirlo. Estamos a punto de poder charlar con una máquina y no distinguirla como tal.

Todavía no está logrado, pero, mientras que con Google busco información, con ChatGPT charlo. Es cierto que, si profundizamos, ChatGPT no demuestra ser un auténtico experto (al menos a mí no me lo ha demostrado hablando sobre Lithops). Pero creo que eso es relativamente fácil de mejorar, lo difícil era conseguir que el software se maneje con conceptos y sea capaz de trasmitir empatía. Y, esas dos cosas, están bastante conseguidas.

Es cierto que ChatGPT a veces se equivoca. Pero, siempre he pensado que equivocarse es propio de los seres inteligentes. Un algoritmo, si está bien programado, no comete nunca fallos, pero un sistema que sea capaz de "razonar" lo lógico es que se equivoque algunas veces y, eso sí, que sea capaz de aprender de sus errores.

Estamos cerca de llegar al momento en que la Inteligencia Artificial deje de ser algo de ciencia ficción y pase a ser algo tan normal como utilizar Google. Pronto podremos hablar con los ordenadores de una forma natural, simplemente hablando.